Quien no haya hecho en estas últimas semanas un análisis más o menos profundo de su trayectoria vital, puede que haya desaprovechado una muy buena oportunidad para hacerlo. Si éste es tu caso, aún estás a tiempo, pues como decía Sócrates, el “conócete a ti mismo” es fundamental para poder avanzar. Así podremos apalancarnos sobre nuestras fortalezas y tratar de corregir nuestros fallos y errores.
Estos meses han sido los más distintos que hemos vivido las personas en mucho tiempo. Es inevitable ahora, caer en una cierta sensación de euforia, con prisas por hacer muchas cosas. Por eso, propongo cuatro claves de adaptación a la incertidumbre para enfocar nuestros esfuerzos:
- Lo primero es asumir que el mundo ha cambiado y no seguirá siendo como era; al menos en bastantes cosas. Ésta es una realidad con la que discrepan algunos expertos, que opinan que “volveremos a las andadas” tan pronto como la situación se normalice, porque la naturaleza humana necesita pasar página de lo desagradable. Sin embargo, pese a que regresaremos a muchos viejos hábitos, hay cosas que ya han cambiado. También en nuestra mentalidad.
- Si queremos sobrevivir como especie, organizaciones, individuos y profesionales, debemos también asumir que debemos aprender, con adaptación a la incertidumbre instalada en nuestras vidas. Para aquellos que les guste tener las cosas/las personas bajo control, quizás sea oportuno modelar la adquisición de nuevos hábitos, desaprender, negociar, fomentar nuevas y mejores sinergias y trabajar más la confianza mutua. Desde mi punto de vista, la comunicación se hará todavía más fundamental para conseguir buenos resultados.
- Esa incertidumbre deberá ser “superada” por cada persona con un ejercicio intelectual (y también afectivo) de realismo sobre nuestros proyectos. Después, deberemos transformar ese realismo de forma optimista en acciones concretas, aprovechando las oportunidades que a veces no vemos. Es necesario valorarlas así, puesto que a veces no somos capaces de verlas con objetividad por nuestras inercias. Para más datos sobre cómo hacer más positiva una situación, puedes ver este artículo.
- Apoyarnos mutuamente, puesto que, gracias a Dios, somos limitados y nos necesitamos unos a otros.
Resumen de las cuatro claves:
- Asumir que el mundo ha cambiado y ya no seguirá siendo como era.
- Aprender a vivir con la incertidumbre instalada en nuestras vidas.
- Hacer un ejercicio de realismo sobre nuestros proyectos. Transformarlos de forma optimista para aprovechar las oportunidades.
- Apoyarnos mutuamente.